“Llamada de atención” para ayudar al Congo a luchar contra la inseguridad alimentaria

10 noviembre 2021. Ayuda humanitaria

Las agencias de la ONU alertaron el miércoles sobre la creciente crisis alimentaria en la República Democrática del Congo (RDC) y pidieron ayuda urgente.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) y El Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (PMA) advirtieron que, si el país no recibe ayuda, la inseguridad alimentaria se agravaría en los siguientes meses.

Unos 27 millones de personas, una cuarta parte de la población del país, se enfrenta a una crisis y a unas condiciones de inseguridad alimentaria agudas, resultado de malas cosechas, desplazamiento forzado de la población por violencia, enfermedad, y colapso de las infraestructuras, según un nuevo análisis sobre el país centroafricano, publicado por la Clasificación Integrada de Fase de Seguridad Alimentaria (PIC).

“La situación alimentaria para una gran parte de la población es deplorable, debido a múltiples obstáculos- inseguridad, enfermedad, devastación, falta de infraestructura, bajo acceso a insumos de calidad y financiamiento – que juntos impiden que la población se pueda alimentar y alimente a sus familias, dijo Aristide Ongone, Representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación en DRC.

Rescatando a un “barco con fugas”

Según el CIP, el número de congoleños en la fase de inseguridad alimentaria aguda es mayor que la de cualquier otro país.

El nuevo informe de la Clasificación Integrada de la Fase de la Seguridad Alimentaria (CIP), muestra que la capital Kinsasa está gravemente afectada y según las previsiones, estas cifras alarmantes se mantendrán así durante la primera mitad del próximo año.

De hecho, el panorama nutricional podría empeorar en algunas regiones y entre los grupos vulnerables, particularmente en niños pequeños, y madres embarazadas o lactantes.

“Estas cifras son una llamada de atención para impulsar mayor acción y hacer las cosas de manera diferente”, dice Peter Musoko, representante y director nacional del Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (PMA).

“Ahora mismo, parece que estemos rescatando un barco con fugas. Tenemos que cooperar con el gobierno, nuestros socios, y el sector privado, para ver cómo infundimos esperanza a la gente del país.”

Mezcla tóxica

La crisis alimentaria de la República Democrática del Congo se debe a una serie de factores, desde la violencia y la inseguridad que han debilitado la producción agrícola, hasta el desmoronamiento de medios de comunicación y de transporte, junto con la presencia de múltiples grupos armados en el noreste del país, lo cual ha llevado a un aumento considerable de la inseguridad en tales lugares.

Incluso cuando se dispone de alimentos, mucha gente no puede permitirse una nutrición adecuada y equilibrada debido a los altos precios de los víveres y a la caída en los sueldos medios.

El COVID-19 ha agravado los efectos desastrosos de los desastres naturales, mientras las medidas para combatir la pandemia han llevado al hundimiento de la economía- la caída de la moneda local y dejando a millones sin trabajo, abocados al sector informal.

Debido al coronavirus y la seguridad alimentaria, aquellos cuya principal fuente de ingresos dependía de la economía se han visto muy afectados, ya que los agricultores han tenido acceso limitado a los mercados, se ha reducido la producción y diezmado los cultivos y el ganado.

“La única forma de romper el ciclo y cambiar estas tendencias es ayudarles a aumentar su resiliencia y productividad”, dijo el Sr. Orgone.

Una crisis urgente y compleja

La Organización de la Alimentación de las Naciones Unidas (FAO) ha incrementado su apoyo a los más vulnerables, con el objetivo de monitorear una respuesta eficiente al alcance, la urgencia, y la complejidad de la crisis.

Si bien el organismo de las Naciones Unidas necesita un total de 65 millones de dólares para proporcionar ayuda para que 1,1 millones de personas puedan subsistir en las áreas donde hay inseguridad alimentaria aguda; de momento solo han recibido 4,5 millones.

La prioridad de la FAO es incrementar el acceso de las familias a herramientas y semillas; proporcionar ganado, que desempeña un papel clave en la mejora de la nutrición; apoyar los procesos alimentarios y el almacenamiento; y ayudar a los pequeños agricultores a luchar contra enfermedades de los animales y de las plantas.

Gama de apoyo

A pesar de un entorno operativo extremadamente duro, el Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (PMA) se ha marcado como objetivo proporcionar ayuda alimentaria, nutricional y económica a 8,7 millones de congoleños, aproximadamente dos millones más que en 2020; y dar comida a 200,000 niños en las escuelas en el año académico 2021-22 y medio millón en 2024.

El apoyo tiene como objetivo satisfacer las necesidades alimentarias y nutricionales inmediatas de los más vulnerables, al igual que crear resiliencia para las familias a largo plazo.

En total, la Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas necesita 99 millones de dólares hasta abril de 2022 para llegar a los más necesitados.

Fuente: ONU Noticias