21 diciembre, 2021
La mitad de niños en riesgo de sufrir violencia por la crisis del Líbano
17 Diciembre 2021. Paz y seguridad
Más de un millón de menores de edad se encuentran en riesgo de ser víctima de violencia física, emocional o sexual y 1,8 millones sufren pobreza multidimensional y para asegurar la subsistencia de sus familias, podrían ser sometidos a abusos, según el nuevo informe de la agencia de la ONU para la niñez.
Uno de cada dos menores se encuentra en grave riesgo de estar expuesto a violencia física, emocional o sexual como resultado de la grave crisis que está atravesando el Líbano, ha anunciado el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) este viernes.
La agitación política y financiera nacional son algunos de los riesgos a los que se enfrenta el país, junto con la pandemia del COVID, y las secuelas aún presentes de las explosiones del puerto de Beirut en agosto 2020.
Según un informe sobre la infancia en el Líbano, UNICEF pone de manifiesto que aproximadamente 1,8 millones de niños- lo cual representa más del 80% de la niñez libanesa- sufre pobreza multidimensional, y esto trae consigo el riesgo de ser víctimas de abusos por trabajo o matrimonio infantil para aliviar la deplorable situación económica que están sufriendo muchas familias. Fueron 900.000 los niños en tal situación en 2019.
Según este informe, los datos indican que se ha producido un incremento del 44% de los casos documentados de abuso y explotación infantil desde octubre de 2020.
Aumento de las amenazas
El estudio indica que se ha producido un aumento de las amenazas a los niños, como el trabajo infantil, en el que niños de seis años trabajan en granjas o vendiendo combustible ilegalmente en las calles, con el riesgo de quemaduras que esto supone.
Por otra parte, las niñas sufren el riesgo de ser entregadas en matrimonios forzados a cambio de dotes. En el Líbano, una de cada cinco niñas de entre 15 y 19 niños está casada.
De acuerdo con algunas organizaciones de la sociedad civil, ha habido un aumento de casos de violencia doméstica, remarcó UNICEF. La proporción de niñas y mujeres libanesas que acuden a servicios de soporte por violencia de género aumentó del 21% en 2018 al 26% en 2019, hasta el 35% en 2020.
De la misma manera, se ha detectado un aumento en los problemas de salud mental en la juventud. Uno de cada cuatro adolescentes de entre 15 a 24 años se encuentra deprimido a menudo, concluye una encuesta realizada por UNICEF en septiembre de 2021.
A medida que aumenta el número de personas indigentes, se teme que el número de niños que tengan que ser separados de la familia extendida y en hogares de acogida incremente a su vez.
El hecho que cada vez más niños hayan sido víctimas de la violencia, empujados hacia actos delictivos para poder sobrevivir, o hayan participado en protestas, les ha hecho entrar en contacto con el sistema de justicia penal.
La protección de la infancia como prioridad nacional
Najat Maala M’jid, representante especial de la ONU para la Violencia contra los Niños, ha instado a la protección de la infancia de cualquier daño, abuso o violencia, y a “la salvaguardia de sus derechos, ahora más que nunca”.
Es esencial invertir en la niñez, para así construir una sociedad pacífica, justa, inclusiva y resiliente, que ampare a los niños frente a cualquier daño y que no deje a nadie atrás”. “No debemos esperar para invertir en el desarrollo, la protección y el bienestar de los niños”, enfatizó.
El papel de la ONU en el Líbano está relacionado con la protección de niños frente a la violencia, el abuso y la explotación. Se está trabajando hacia este objetivo mediante la reducción de la pobreza; la mejora del acceso a servicios de bienestar social, en la educación y en la mejora de atención médica. La ONU también colabora con el gobierno para abordar aquellas normas sociales que normalizan la violencia contra la niñez y para fortalecer los sistemas de protección.
En este sentido, la ONU ha urgido el despliegue de una respuesta a nivel nacional que priorice la protección de los menores de edad y pidió a los donantes internacionales apoyo urgente para proporcionar ayuda vital a aquellos más vulnerables.
La representante especial para la violencia imploró a nivel internacional que no abandonen a los niños libaneses. Añadió que ellos “son el futuro y la esperanza del país”, y ninguno debe ser privado de derechos básicos como la salud, la alimentación, la educación y la protección, independientemente de cuál sea su nacionalidad.
Remarcó la representante especial de la ONU para la Violencia contra los Niños, Najat Maala M’jid, que los niños deben ser una de las prioridades en las políticas, los planes y las prácticas de recuperación del gobierno.
Fuente: ONU Notícias// Autora: Noelia Gómez Bosqued, estudiante de prácticas en ANUE