11 enero, 2023
4 meses desde el inicio de las protestas en Irán, en qué punto nos encontramos?
Han pasado 4 meses desde que comenzaron las revolucionarias protestas en Irán y su población se mantiene firme a pesar de las barbaries de las que ha demostrado ser capaz el régimen. Al menos 500 personas han muerto y más de 2.000 han sido encarceladas por su participación en las protestas, algunas de ellas a la espera de su ejecución.
Mientras cientos de ciudadanos iraníes se enfrentaban con las fuerzas de seguridad, se daba comienzo al mundial en Qatar, donde su equipo nacional de futbol permanecía en silencio mientras sonaba su himno nacional. Un acto discreto, pero cuyo riesgo se probó, cuando 3 días después se arrestó a uno de los futbolistas más famosos del país: Vouria Ghafouri, opositor declarado del régimen. Una flagrante amenaza por parte del gobierno que se ha repetido con el arresto de Amir Nasr-Azadani, otro de los futbolistas que se ha atrevido a protestar y que se encuentra ahora mismo condenado a 26 años de prisión.
Pese a que el régimen ha intentado aliviar el rechazo antigubernamental con la supuesta abolición de la Policía Moral, el pueblo iraní no se ha dejado embaucar. Poco puede solventar la abolición de un cuerpo como éste, cuando en el país siguen y seguirán siendo vigentes unas leyes profundamente represivas. Tras los sucesos ocurridos hasta ahora, el régimen ya no es capaz de enmascarar sus verdaderas intenciones y ha recurrido a sembrar el miedo, estando dispuesto a tomar cualquier medida con tal de conservarse.
Así, se han dado comienzo a las ejecuciones; el 8 de diciembre se produjo el primer ahorcamiento de un chico de 23 años tras menos de un mes de su arresto y sin un juicio con garantías. El motivo de su muerte: hacer la guerra en contra de Dios. Tras la ejecución, Taraneh Alisdoosti, una de las actrices más célebres de Irán, mostró su apoyo a la revolución con una foto de Instagram en la que aparecía sin el hiyab y con un cartel que ponía: “Mujeres, vida, libertad”, por lo que poco después fue arrestada.
Mehdi Mohammad Karami, de 22 años, y Seyed Mohammad Hosseini, de 39 han sido los últimos ejecutados tras ser acusados de matar a un miembro de las fuerzas paramilitares. A día de hoy, la vida de al menos 20 personas depende del sistema judicial iraní y desconocemos el alcance que puede llegar a tener su crueldad. Lo que está claro a estas alturas, es que el régimen silenciará a todo el que pueda, pero no podrán acabar con la revolución.