16 junio, 2022
DÍA MUNDIAL DE LA TOMA DE CONCIENCIA DEL ABUSO Y MALTRATO A LA VEJEZ
Coincidiendo con el inicio de la década de las Naciones Unidas para el Envejecimiento Sostenible (2021-2030), y con la conmemoración del vigésimo cumpleaños de la implementación del Plan de Acción Internacional de Madrid sobre el Envejecimiento (MIPAA), este año el Día Mundial de la Presa de Conciencia del Abuso y lo Maltrato en la Vejez (15 de junio) se hace todavía más especial.
EL MIPAA
El Plan de Acción Internacional de Madrid sobre el Envejecimiento, implementado en abril de 2002, es la representación en un acuerdo mundial para recalcar la importancia de los derechos humanos también durante la etapa de la vejez para evitar, sobre todo, el maltrato, desafortunadamente muy presente todavía en la gente mayor y un problema oculto en gran parte de la sociedad. No obstante, sin un instrumento legal internacional para efectuar al 100% este acuerdo, las grietas entre la teoría y la puesta en práctica todavía son muy presentes.
LA NECESARIA PROTECCIÓN DE NUESTRA GENTE MAYOR
La población mundial mayor de 60 pasará a duplicarse de 900 millones a 2000 millones de cara al año 2050, lo hace más evidente todavía la urgencia de acabar con el maltrato en esta franja de edad puesto que de lo contrario, irá en aumento.
Durante la pandemia de la COVID-19 maltratos a las personas mayores aumentó y la tasa de maltrato en residencias y centros de gente mayor también sufrió un aumento significativo en donde 2 de cada 3 trabajadores de estas instituciones indicaron haber infligido malos tratos en el último año.
Es necesario acabar con el abuso y maltrato a nuestros mayores aun cuando el desconocimiento total de su magnitud actual y los diferentes contextos culturales entre países lo hacen difícil.
Este problema requiere una respuesta mundial conjunta y organizada que incluya garantías de atenciones primarias de calidad y servicios sociales muy preparados para detectar y tomar medidas para la resolución de este problema a gran escala.
Las personas mayores gozan de los mismos derechos de bienestar y salud que cualquier otra persona.